Probar con los infinitos, marcando el paso primero
en cuatro movimientos, con la pelvis relajada, si lo estás haciendo bien, no
deberías sentir dolor en la espalda. El círculo grande se hace con las piernas
más abiertas, para el pequeño, las ponemos en paralelo y sólo movemos la parte
de abajo de la barriga, en horizontal, que no te salga sambero. Son movimientos
contenidos que se deslizan suavemente para acabar marcados por un rápido
movimiento de cadera.
Los brazos abiertos pero relajados, sin marcar
tampoco, los movimientos tienen que ser delicados. Una vez lo tienes haz que
tus manos parezcan serpientes, con sólo dos o tres dedos. Cuenta cuatro y
párate, el siguiente paso lo marcará el péndulo, delante y detrás, sin dejar de
marcar con la cadera el final. Aquí simula que te desprendes de la camiseta y
al bajar hazlo perfilándote la cara lateralmente, para bajar hacia el tronco,
descansar en las caderas y volver a juntar tus manos en la zona pélvica. Repite
movimiento unas cuatro veces, después gira con pasitos, si puede ser, que un
pie no quede demasiado alejado del otro, estira un brazo, con el otro simula
que tocas dulcemente la cabeza ladeada de manera que
acompañe al giro que realizas.
Para practicarla, decide poner otra canción más
lenta. Ya la había escuchado mientras ella buscaba canciones. Tres son las veces
que he escuchado Aisha hoy, con voz de Cheb Khaled. Al acabar la
clase no he podido evitar dirigirme a ella "-Has puesto Aisha, ¿sabes que
esa canción me encanta, es muy especial para mí?-".
Vengo de mi segunda clase de la danza del vientre,
la semana pasada las agujetas me duraron tres días. Me doy cuenta de lo
perfeccionista que soy, me desespera el que algo me salga mal y entonces
me sale peor. Creo que esos pasitos hacia el lado no van a salirme nunca...