jueves, 12 de julio de 2007

Callejeando....

“-¡Me encanta ver lo ilusionada que estás, me siento orgullosa de haberte traído aquí!”

“-¿A que sí? ¿A que cuesta poco hacerme feliz?-”
Mi primer espectáculo en vivo y en directo de danza oriental. Cinco palmos me separaban de ella, de hecho, casi me da con todo el velo en la cara. Poco más de quince minutos de baile pero suficientes para reconocer muchos de los pasos y sorprenderme de lo mucho que hemos aprendido las dos en nuestro primer curso de danza oriental que hoy despedimos con nuestra cena particular, pasando del resto de la clase. Nos quedamos con un par de pasos para practicar y la boca abierta porque no entendemos de dónde leches sale ese shimmy que hace que la barriga le tiemble así, ¿de cintura? ¿de cadera? ¿qué coño es eso? !!Las rodillas!!
Nos hemos arreglado mucho las dos; yo he estrenado mi vestido verde botella y la mística me ha cosido el escote refunfuñando porque ella lo llevaría tal cual. Ahora me duelen mucho los pies y me he vuelto a quedar atrapada en casi todos los baldosines del Born, me he tragado un escaparate de ésos tan modernos que parecen estar más lejos de lo que en realidad están y nos hemos reído mucho, sobretodo porque he agarrado a Andrea para salir corriendo de la escena, con lo mona que iba y con ¿un chichón? He tomado mi primer y mejor piña colada de la zona; tres viajes he dado a la barra para pedirle hielo al chico, me moría de calor. A mi lado, un cubano marcándose un bailecito con su recién estrenada novia rubia y patosa, ella flipando con el pedazo de tío que llevaba de adorno. He confundido dos taburetes de bar apilados de manera original por una escultura moderna, he disfrutado mucho viendo cómo Andrea me enseñaba su barrio favorito, perdiéndonos por callejuelas para encontrar los mejores restaurantes y leer los menús en la puerta, he encontrado algún barrio de los del libro "La Catedral del Mar", entonces he pensado mucho en ti, porque tú me díste un paseo muy parecido por Gràcia hará unos once meses ya, allí fue "La Plaça del Diamant" y mi primer mojito en el lugar más emblemático del lugar, el cual no me gustó, todo hay que decirlo. Comimos en un sirio y vimos C.R.A.Z.Y. la cual te encantó a pesar de no dejar de chincharme con la peli que había elegido.
Aparto pensamientos y le digo a Andrea de brindar; por obtener ambas buenos resultados médicos en unas semanas y por un buen verano. También es mi primer brindis como mujer divorciada, ésa palabra me hace sentir vieja. Creo que me quedaré con soltera, con hijos y un padre pero soltera. Lo de sin compromiso no la acompañará, yo siempre tengo un compromiso, empezando por mí misma ¿no?