Te vas ya?

Air “Highschool Lover”

 (porque me rondaba la idea de hacer que te durmieras escuchándola, por su título...nunca te pararás a escuchar los mensajes así que puedo atreverme con todo...)

Coldplay “42”

(para seguir acariciándote en la distancia)

Radiohead “Nude”
 (Cualquier excusa es buena para escucharla, capaz de transmitir todo tipo de sentimientos, aquí tiene que sonar a todas esas silenciosas lágrimas que han ido cayendo mientras asimilaba tu marcha. ¿Sabes que también me he dado cuenta de que no te amo lo suficiente ya para esperar o luchar?. Me he acostumbrado tanto a ser tu amiga, vivo tan cómoda en el papel que no me moveré de él. Creo que el cariño que nos ha quedado es más sincero y eterno...)

Editors “Put your head towards the air”
(Sus guitarras y su voz. Porque sé que nos gusta.)

Elbow “Starlings” 
(Jugábamos a soprendernos con música; uno se giraba y el otro buscaba una canción, algunas tenían truco, otras nos gustaron mucho y las apuntamos. Silencio absoluto al sonar esta, después la apuntaste en tu hoja, apartado descubrimientos...yo la adoro)

Boy Kill Boy “Hidden track” 
(El hidden track resultó ser uno de mis favoritos. A veces suena algo fifi pero entonces llega la subida y vuelves a ponerte melancólico y con ganas de aprenderte toda esa parrafada.)

Snow Patrol “Set the fire to the third floor” 

(Me recuerda a aquel dueto de Nic Cave y Kilie Minogue tan increíble de creer y tan bueno de escuchar, primera canción que me hicíste escuchar de él...)

Arcade Fire “Neon Bible” 
(Esta quiero que te guste, el grupo entero quiero que te guste, porque son de los lentos pero originales como pocos)

Vampire Weekend “Oxford Comma” 
(Primera canción para cambiar el registro no sea que te quedes dormido, para vacilarte un poco con lo de mis descubrimientos en el tema independiente)

The Twilight Sad “That summer, at home I became the invisible boy” 
(Dándole paso a las guitarras, como buena alumna del maestro de género llamado "Dark"

Correcto “Do it better” 
(Explotando mi vena punk aunque en vez de cresta haya tenido look afro, el punk, post punk y todas sus derivaciones me siguen quitando el dolor de cabeza...)

Vampire Weekend “A punk”
(No sé por qué pero me traslada a Kortatu, más ruido...)

Elbow “The Bones of you” 
(para volver a respirar y cambiar de registro, que el corazón vuelva a su ritmo normal y vuelva a recordar el por qué de éstos sonidos...)

Vampire Weekend “The kids don’t stand a chance” 
(ahora túmbate, vuelve a apoyar la cabeza en la almohada. Si quieres, puedes cerrar los ojos...)

Bat for Lashes “Trophy”
(se cuela rabia, y como también se siente de tan en tan, voy a dejar que se explaye en forma de canción. Me agota sentir tanto las cosas)

The Verve “I see houses”
 (Primera parada al ir escuchando lo nuevo de ellos. Me encanta escucharla, es otoñal 100%. Ese "You got a feeling That you You've been here before" suena tan real.)

Radiohead “Videotape” (una despedida)

"- Ala!, el volumen III? Y ¿yo no tengo los primeros?-"

"- Bueno, es que ya son viejos. Aquí hay material nuevo, espero que te guste. Éste, el de Under Desert Stars es muy dulce, casi todo con tintes orientales. Esto también es para tí. El concierto de Muse te lo he puesto porque tiene una calidad genial y suenan como nunca...-"

Y me separo, porque quiero abrazarle pero en realidad estoy cansada y quiero que empiece a irse ya, que no me explique lo que ha empaquetado, ni escuchar cómo explica al resto que es su novia la que está buscando casa para compartir. A mí me antepone su trabajo de investigación a la convivencia, pero la gente le da palmadas en la espalda para decirle que no se escaquee, que lo que va a hacer ya es sentar la cabeza y vivir en pareja.

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"- Ahora, para escuchar la música del viaje tenemos que cambiarnos de habitación.-" Nos levantamos de delante del ordenador. "- En ese montón de libros de los que están en esa mesa, hay uno para tí, a ver si sabes cual es...-" Está en segundo lugar, me giro y lo señalo. Asiente con la cabeza así que lo abro. La dedicatoria hace que vuelva a girarme, dándole la espalda para que no me vea llorar. La leo dos veces y no dejo de asentir con la cabeza. Cuando giro de nuevo, veo que me esperan sus brazos, me cobijé en ellos y ya no volví a dejarlos en toda la noche. Volvimos a encontrar el lugar exacto para el sonido en su habitación, pero nadie se sentó. Puede que desde ahí se recibiera el mejor sonido pero el lugar más puro era el uno al lado del otro. Nadie llamó a la puerta, ni el deseo, ni las ganas de traicionar a nadie de los que forman parte de nuestra vida en estos momentos. La magia fue verle dormir, completamente vestidos y cansados, hablando a intervalos. Le hablo de Ámsterdam, del tema drogas allí, de que, a pesar de haber ido con una mujer completamente diferente a mí, estuvo bien, muy tranquilo quizás. Pero yo volví con mis experiencias con la gente. Le explico lo de mi llavero regalo del dueño de un coffeeshop, lo de los peques en Castellón y lo de la danza y se me van las palabras. De todo lo que he aprendido este verano, de que ya estoy en este mundo, que me saqué el Módulo de Profesoras del nivel 1, que empiezo a reconocer los ritmos, bla,bla,bla. Hasta que uno de los dos se queda dormido, no recuerdo quién cayó primero. Yo me separo porque quiero abrazarle pero es que sigo cansada y quiero que empiece a irse ya...

Una mala postura

Llevo días pensando que quiero hacerte un regalo antes de que te vayas, un Cd quizás, pero sé que puedo estar sentada horas delante de la pantalla y seguiré sin sacar nada. No hay inspiración. Todavía estoy digeriendo que te vas, tan lejos y por tanto tiempo.

Con el tiempo, he notado que hay personas que me preparan para las cosas. Creo que son los más cercanos, los que me conocen mejor, y aunque haya mejorado considerablemente el estado de decepción, tristeza o angustia que solía poseerme, el sentimiento queda dentro. Marc tiene razón; sino lo saco, éste sale al exterior, sólo que enmascarado con el nombre de algún dolor, una de ésos que se cogen por una mala postura.

Estos días te observo. Actuamos como siempre, como si la rutina no fuera a cambiar, como si dentro de un par de meses, cuando hubiera llegado el frío nos fuéramos a tomar algún té al salir de nuestros respectivos trabajos. Como si fuéramos a quedar para algún concierto o cena con charla hasta la madrugada.

Pienso en nosotros; en las cosas que hemos hecho. Como cuando aquella vez me enviaste un mensaje y yo me escapé de una reunión para pasar la tarde juntos mirando tiendas de música en Barcelona. Volvimos que ya era de noche. Yo con el Discbox de Radiohead y tú con un montón de rarezas. Con las coartadas laborales para poder asistir a los conciertos de despedida de The Mission. Recuerdo cuando una vez me forzaste a hablar del pasado y yo me escondí en tu lavabo porque no podía dejar de llorar. O el día que estrenamos mi acústica mística de Peter Gabriel en tu casa. Habías encontrado el punto justo en el que había que sentarse para que la música te llegara al 100%. Pasamos cerca de setenta minutos en silencio, casi sin luz, tan sólo música.

Después del verano, una de las cosas que más me gustaba hacer era esa cena en casa donde nos poníamos al día de cómo nos había ido. La verdad es que con el paso de los años te he ido explicando cada vez menos de mí y te he escuchado mucho. Siempre he tenido claro qué fue lo que me enamoró de ti...

Dices que serás tú el que añore lo que dejas cuando estés allí porque aquí todos seguiremos con nuestra vida. No te creas, algunos tendremos que modificarla...

¿Sabes? Creo que ya te echo de menos...