jueves, 31 de agosto de 2006

Bossy



"You don't have to love me.. you don't even have to like me..but you will respect me"     (Bossy by Kelis)

Salí de la reunión algo triste y con mucho sueño para encontrarme con las Bridgets. Desde el 98 nos conocemos y ya estamos en el grado ese de la amistad en el que te picas, discutes y luego olvidas rápidamente. Al llegar no estaban y no es que llegaran tarde porque su lugar de trabajo ya estaba cerrado. Las muy tunas habían cerrado antes para tomar unas cañas y así, obligarme a aparcar y unirme a ellas. 
Ya sabían que venía muy peleona, aunque la cosa no iba con ellas, y hacía más de un mes que no nos veíamos. Me gustan las caras que ponemos y los abrazos que nos damos. Todo son piropos, aunque no sea verdad, aunque nos veamos más gordas  mentimos. No es cuestión de deprimirse antes de empezar. De todas maneras, ya me esperaban con un dilema en el que no tuve más remedio que apoyar a C. para decepción de Y. Les recordé el Dvd pendiente y dejamos el local. Yo sólo tomé una clara pero cuando el camarero preguntó cuántas había que cobrar, ellas dijeron: ¡siete! "¿Cómo les ha dado tiempo?"-pienso divertida, mira que aguantan estas dos, Sue Ellen es una principiante al lado de ellas. El resto de la velada fue como siempre, divertido y mucho. 

El último día de mis vacaciones pretendía pasarlo leyendo pero no tengo la sensación de que se acaban. Sí que escucho 31 de agosto y salto, pero procuro pensar en que la tarde la tengo libre, me escaparé a por un libro y esperaré impaciente la llegada de los peques. Una semana sin verles y la casa super limpia, ya verás mañana. He esperado a que ella esté aquí para decorar su habitación, tiene funda nueva y haremos un móvil de "chicas modernas", quiere cenar pizza e ir a la playa. 

Pues allá va...se cierra el mes de Agosto y yo me quedo con:

. todas las actividades que he podido hacer con los peques. Me consta que han tenido un buen verano, no ha habido un día en el que no me haya acostado satisfecha por lo que hemos hecho. Me encanta sentir sus cuerpecitos cuando les abrazo, están cada día más guapos y se expresan cada vez mejor.

. he leído unos cuatro libros creo, entremezclando revistas, salgo del mes con La Catedral del Mar, lo estoy disfrutando. Travesuras de una niña mala me ha encantado, entiendo a esa niña mala más que el protagonista. Me impactan esas mujeres tipo huracán, no es que arrasen exactamente pero a nadie deja indiferente. Le sigue "La Historia del amor", lo devoré, porque lo leí en mi rinconcito de Tarragona y lo disfruté como pocos pero quizás por haberme quedado más impactada por la niña mala, Alma, la protagonista de éste, no me llegó tan hondo.

. la película que me ha tocado ha sido C.R.A.Z.Y., hacía tiempo que no oía tanto "sniff,sniff" en el cine. Por "culpa" de ella, me pasé todo el día siguiente escuchando a Bowie en el Ipod. Divertida y tierna, con cuatro hermanos a cual más diferente dentro de una familia que lucha duramente por ser convencional.

. este verano ha sido el electrónico por excelencia, pero no he olvidado mi vena independiente, he conseguido enamorarme absolutamente de Arcade Fire, me gustan todas, absolutamente todas las canciones del Cd Funeral. Los adoro! Creo que están preparando el segundo trabajo...son de esos grupos que al principio cuesta pero un buen día dices: "¡Qué buenos son!" hay que escucharlos vaya y unas cuantas veces. Ahora intento que me entre el nuevo de Prince por lealtad, porque le sigo desde siempre, pero es que ya llega un punto en que todas me suenan igual.

. ha sido el verano de las claras. No he probado ni un Nestea y horchatas también han caído pocas. Como novedad, un filipino en Barna y un garito cubano muy antiguo en Gracia, tan a tope que no se escucha la música y te lloran los ojos.

. el verano de limpieza, de olvidar, de dar y lo siento, a cambio de recibir. Quizás no en  la medida que me gustaría, pero algo, voluntad quizás. Aún no lo diré muy alto pero creo que me despedí de sus brazos, porque me despertó de mi proyecto de siesta y quise sin seguir verle. Me até las manos el día de un cumpleaños, para no felicitar a nadie que no lo mereciera y así me encontraron, con las manos atadas y sí, me las desataron o quizás me las desaté yo para coger las suyas. Pensé con dulzura que no era mi cumpleaños pero que también tenía un regalo y como tal lo disfruté. Desde aquí: gracias.

. el verano de pasar días tranquilos con mis padres. No han sido ideales pero hemos logrado una calma importante en la relación. Lo más importante es que han podido verme mejor. Sus viejas canciones sobre los mismos temas me han hecho pensar en esa frase de "hay cosas que nunca cambian..."

En general, me he portado muy bien este verano, ha sido quizás al final que me he desmadrado un poco pero ha valido la pena. Traigo chip nuevo para unos meses, si funciona genial y sino pues a seguir mejorándolo.

viernes, 25 de agosto de 2006

Almería Creamfields 2006




A éste sí que le pongo año porque dudo que vuelva a repetir; primero, no creo que vuelva a esa parte de Almería; Andalucía es muy grande y tengo ganas de explotarla más y mejor...y segundo, porque estoy a punto de decidir que no me gustan los festivales. Antes de afirmarlo al 100% o dejar de ir a ellos, tengo que probar Sonar (porque dudo encontrar gente para el FIB), así  habré estado en tres y  será más fácil decidir.

A Creamfields se acercaron unas 40.000 personas. El viaje hasta allí lo hicimos en unas "lanzaderas" que la organización había colocado en Vera; cada media hora pasaría ininterrumpidamente hasta las 12'30 horas de la mañana del día siguiente. Era como ir de excursión en un viaje organizado con gente muy diferente; yo miraba a un chico rubio, llevaba el largo y sedoso pelo rizado en una larga cola, camiseta negra y ojos muy grandes..."¿De dónde será?"-pensaba-. Soy muy mala para éso, cuando pienso andaluces son italianos y al revés...pero para éso tengo a A., que ya te insiste en que ha vísto mucho mundo y te pone en orden la procedencia.

El anticreamfields nos esperaba en la larga bajada hacia el recinto. Primera diferencia con Summercase; mucha y buena comida. A cualquier hora podías zamparte un bocata caliente. Mucha gente haciendo negocio pero se lo curraban así que yo encantada. Los otros, los pringaillos, sólo te decían el nombre de las drogas que pasaban. Recuerdo un trío que gritaba a un posible cliente: "Tío, MD...A, no, cómo era? MDCA"- "MDMA gilipollas!"- me entraron ganas de decirle, si hasta yo lo sé sin tomarla. Como el tomarla te deje el efecto del que la vendía vamos listos...

Aquí hay mucha droga, es una de las atracciones del festival, éso y las doce horas que la gente iba a pasar metida allí para continuar la fiesta en cualquiera de los afters que se iban montando en la playa al despuntar el sol, así que me acerco al stand "Energy Control". Allí hay folletos informativos de todo lo que puede estar corriendo toda la noche. No sólo eso, puedes llevarles lo que vas a meterte y te dicen si está adulterada o cortada, un vist i plau y pastilla para dentro. Bueno, al menos era de agradecer ver como la gente iba haciendo uso del stand. Cogí unos cuantos folletos sonriendo, sabiendo que iba a provocar una interesante discusión con Shrek sobre ciertas sustancias que no iba a tener desperdicio.

Bien, ubicación hecha; cada escenario con su nombre aprendido (yo me confundo con dos pero no digo nada) y un "meeting point" llamado "5" y "amarillo" por todos. Como norma, si alguien se pierde, una llamada y al meeting point. Ya estoy dentro, así que envío sms a mi sister haciéndoselo saber. Otra diferencia con Summercase; aquí dejan entrar comida, así que nos hemos traído 4 deliciosos bocatas preparados en el hotel. Un bocata de mojama...qué bien suena ¿verdad? F. me ha colado un Red Bull, llevo chanclas (muy a mi pesar) y por fin estoy allí, así que me preparo para vivir Creamfields.

G. se parece a un famoso Dj, eso lo sabemos y ya estamos acostumbrados a esos malentendidos, accediendo incluso a echarles la foto con los "fans" que no quieren creer que no es él, pero lo que vivimos allí fue increíble. Por fin sé lo que se siente siendo famosa!! y eso que no iba conmigo ¿o sí? ¡soy su manager! Codazos a los amigos al verle pasar, abrazos, felicitaciones, niñitas pavas que no tenían ni idea que quien era pero ¡era famoso! Muy divertida la anécdota de la morena, la del autógrafo en los pechos. "-Have u got a pen?-"-"No tío!". Tan sólo me miró y dijo "Where's a pen when u need it?" Le contesté divertida que ya sabía lo que tenía que llevar encima a partir de ahora. A las dos horas, la bromita le tenía reventado y hasta que el propio Dj no salió a escena prácticamente no le dejaron en paz. Esa parte no la ví, a esa hora estaba caminando hacia el hotel, de día ya y con el sonido de gallos acompañando mis somnolientos pasos...

Ví a Jeff Mills y lo disfruté, también supongo por ser el primero, Audiobullys estuvieron geniales, quizás también porque más cerca no los podía tener gracias a la manera tan dispersa en la que el público se organizó. Las mejores fotos de las actuaciones  son ésas. Al acabar nos dividimos; chicos a 2ManyDjs, chicas a Vitalic. Envié sms a V., se suponía que tenía que estar también allí.Volvió a recordarme que no me perdiera Vitalic así que, en parte, lo hice por él, y acertó. Me gustaron.

Durante el concierto conocimos a un grupito de Rubí. Recordemos que yo no estaba de muy buen humor por allá abajo así que no estaba para muchas tonterías (por no decir ostias). Si estoy en un concierto es para escuchar la música y no para explicar qué hago en Almería ni mi nombre ni todas esas chorradas, así que me canso pronto de I., un semi okupa que me justifica enseguida su presencia en aquel sitio. "¿Y te gusta el punk dices? ¿Qué grupos?"-le pregunto- y no me enumera ni uno sólo de los clásicos..."¿Qué hago yo aquí?"-me pregunto en algún momento de la noche mientras me despido y alejo de ellos divertida. A. va más contenta, estos chiquitos le han dado subidón de autoestima pero yo pienso en M y no sé por qué. No nos hemos vísto en todo el mes pero estamos acompañados, se ha establecido un silencioso pacto entre nosotros para poder llevarnos bien, de una manera muy peculiar.

Otra diferencia con Summercase; no pararon de limpiar en toda la noche, todos los que llevaban el chaleco amarillo compartían la misma procedencia.

En el mismo escenario sale Miss Kittin; un anuncio informa de que la compañía aérea ha extraviado sus vinilos y hará la sesión con Cds. Soy la única que no la ha vísto y los demás no hablan muy bien de ella, sobretodo si le da por cantar. Y eso pasó, no me mató. La prueba está en que tardé en ver que ya llevaba un rato tocando. Es verdad,ella es Dj, mejor que mantenga la boquita cerrada. Whomadewho también fuera de mi lista porque cancelaron actuación esa misma mañana.

A eso de las cinco se me planteó el dilema de la noche; irme con A. o quedarme hasta las tantas y el sentido común pudo conmigo. Apenas me sentía las piernas así que la idea de retirarme y aprovechar buena parte del día siguiente fue muy tentadora. Aún así tardamos otra hora intentando adivinar por dónde leches pasaría el bus. 

En la subida, el anticreamfields todavía y sus bocatas calentitos. Al final de la carretera, al más puro estilo "Los Hombres de Paco" un grupito de ocho guardias civiles. A., la que ha visto tanto mundo, recibe un codazo mío al escuchar como se dirige a ellos como "la policía". Más tarde me dice que no sabía que se molestaran tanto por equivocarse de cuerpo. Es que hay cosas que no te las enseña el ver tanto mundo.

Conozco a un estudiante argentino que, con la excusa de buscar una universidad, se está pegando unas juergas increíbles por todo el mundo solo. Nos cae una invitación a un after en la playa y vuelvo a ver al hippy de la cola rubia en el autobús, es andaluz y bastante seco.

Sonido deficiente de nuevo en general: ésto es un festival. Disfruté más Summercase por el cartel; había más y variados grupos, mucha suciedad, costaba encontrar papeleras y a mí me cuesta ser sucia. Anécdotas en los lavabos que no escribiré para poder olvidarlas. La gente muy maja en general aunque no utilizaré la palabra "sanota" ¿En serio hay que meterse tanta mierda seguida para disfrutar?

A las pocas horas, repasando las fotos de los chicos mientras duermen, vemos que aguantaron hasta el final, pero de Creamfields, nada de playa. Aún así, les quedaron fuerzas para desayunar como reyes en el hotel y leer, de primera mano, la crítica del festival. Nosotras pudimos disfrutar de playa y ellos dormir hasta las 18'30, hora en que volvieron en sí y volvimos a reunirnos en el hotel delante de una cañita y otra tapa de mojama...

Buff...por fin lo acabé. Ahora me he desvelado...

martes, 15 de agosto de 2006

Almería 2006 Un lugar: el Terraza Carmona y mi reflexión desde aquí





Nos hospedábamos en Vera, en el hotel Terraza Carmona; un hotel lindo por fuera, que aparecía de repente al dejar una pequeña rotonda en la calle México. Jamás hubiéramos pensado encontrarlo entre esas calles. Muy taurino todo, al primer cartel del Cordobés y Julio Aparicio que veo le quiero echar una foto, pero A. me hace notar que no me ría, que en ese hotel los adoran. No sólo eso, el hijo del dueño se estrena como novillero mañana, de ahí tantos carteles. 

Y es verdad, cuando presto atención al interior, veo que sigue siendo tan lindo como por fuera pero también que el hall es presidido por dos cabezas de toro enormes. Nuestra habitación es la 205, segunda planta al final del pasillo. Mientras nos dirigimos a ella, me giro para silbarle a G. la canción de Four Rooms, cuando Tim Roth va de botones por esos mismos pasillos porque eran clavados. Lo pilla enseguida y ríe conmigo, no así el resto del grupo, pero para cuando piden que repita ya hemos abierto la puerta de la habitación: colchas y cortinas a juego que me hacen recordar a la famosa colcha de ese videoblog tan divertido (http://www.quevidamastriste.com/) donde el chico siempre habla desde esa colcha tan, tan horrorosa. Le propongo a A. hacer la versión en chica. 

El listo de G., debido a su tamaño, se pilla la mejor cama y como todos evitamos estar cerca de él porque ronca como un condenado, A. y yo nos quedamos con las supletorias mientras ellos se parten porque son las más incómodas. Pero son cuatro noches y somos cuatro así que a callar o hacemos rotación! Nuestras noches allí fueron horrorosas para F y para mí, imposible dormir con G al lado. Incluso una vez le llamamos al móvil para ver si cambiaba de postura pero lo único que conseguimos fue que se levantara mosqueado :(. 

La solución fue dormir con los Ipods. A mí no me gusta dormir con música, necesito mucho silencio y el Ipod tenía que estar bastante fuerte para neutralizar esos ronquidos de Shrek de la mejor cama de la habitación. Había momentos por la noche, en los que todos ya dormían menos yo. Les sentía respirar y me gustaba el sonido (quitando el que ya sabemos), el grupito durmiendo, qué diferentes éramos y míranos, hemos pasado de compartir horas a días enteros. Claro que eso lo dije antes de sentirme en la casa de Gran Hermano.

Nuestras mañanas consistían en desayunar en la plaza.  Yo llevaba muy mal lo del café así que me costaba horrores llegar hasta allí. Después soportaba divertida la tomadura de pelo sobre el cambio en mi persona camino del segundo café pero mi querido G. se enrolló tanto que me propuso que, ya que él llegaba antes, le hiciera una perdida cuando fuera a salir para tener el café nada más llegar. "-Do I love this guy?-" . También hay que decir que iba antes porque los cruasanes volaban y casi nunca había para nosotros.

Yo iba algo preocupada por el dinero. Mi presupuesto era más bajo, decidí sacar menos de lo que dijimos porque si pensaba ahorrar era en la comida, puedo vivir de tapas y bocatas cuatro días, de claras y algún ron con cola no me sacas en verano, y de vicios ya sabemos cuáles son, así que la idea de tanto bote común no me acababa de convencer, pero la verdad es que comimos siempre muy bien y  barato.

En la última noche, volviendo cansados al hotel, con resacón de cansancio por el festival y algo callados porque ya hablábamos de Barcelona, decidí que iba a volver a Andalucía muy pronto. No la he vivido como me esperaba, me he acordado muchísimo de mi sister, con ella la hubiera disfrutado más, lo sé.  He visto el blanco de las casas, me he contagiado de la tranquilidad de la gente, he observado muchísimo todo y me ha recordado muchas cosas de mi niñez, muchas de ellas gracias al barrio donde crecí, pipas...muchas pipas. 

En la entrada al mercado un puesto de granizados de limón y mucha gente que me resulta familiar. Qué sensación más curiosa, siempre pensaba "creo que ya la he visto antes por aquí" ¿familiaridad? No lo sé. El caso es que me siento muy de aquí, de hecho tengo un tío que nació en esa misma zona y la de mis padres no anda muy lejos. Pienso que sí, que me gustaría retirarme aquí. Creo que es de la mejor manera que uno puede acabar sus días...de manera lenta, sin prisa pero sin pausa, como todo en aquel pueblo. A mi lado un rótulo luminoso que anuncia un concierto de los 70 con Jeannette, Los Bravos y no sé quién más. Es en la Plaza del pueblo y cuesta 30 euros. 

Bien, mi reflexión la termino aquí; por más que nos queramos, no somos un grupito para ir de vacaciones. Un finde en Londres no está mal, siempre hacemos lo mismo y a eso es a lo que vamos. Pero aquí ha sido diferente; yo he ido a Almería y a Creamfields, ellos a Creamfields y Almería. Somos muy diferentes, ya me lo comentó alguien hace poco, con ideas y modos de ver la vida de manera muy diferentes pero con unos hobbys y un humor muy nuestros y muy arraigados ya, como mis quinielas de los Oscar con G durante los once años de amistad que nos unen o nuestras acústicas. En fin, será eso de que el roce hace el cariño ¿no?

Mañana vuelvo a tenerles por aquí, por la noche. Me llevo a los peques al zoo, A. se apunta también. La idea era juntar todas las fotos en mi ordenador y verlas, cenar y cuando los peques duerman, ver 800 balas de Álex de la Iglesia. Tenemos mono de ver Tabernas en película ahora. 

Bien, yo era la encargada del video y resulta que no la tienen. A ver si el señor eMule se porta bien esta noche y no deja de trabajar ;-)

miércoles, 9 de agosto de 2006

Almería 2006 La excursión: Tabernas



Una de las dos excursiones "planeadas" y el, tan esperado, sueño de G., era la visita a Tabernas. A mí no me convencía mucho la idea, ya dije que no me fiaba mucho del grupito a la hora de hacer planes, aún no tenía muy clara la distancia desde Vera (donde dormíamos) al desierto y después del palizón de coche y de la primera discusión que tuve con F. en él, me apetecía separarme del grupo por unas horas , visitar Vera y tumbarme en una de sus playas. Pero G. es G. y verle tan ilusionado no es algo que vea cada día así que me apunté y la verdad, no estuvo nada mal.

Resulta que había no uno, sino cuatro estudios de cine en el desierto; todos estaban en la misma carretera, así que decidimos quedarnos en el primero; Fort Bravo, que luego resultó ser el original: escenario del anuncio de Pepsi y del film "800 balas" de Álex de la Iglesia entre otros títulos más serios del celuloide como "El Bueno, el Feo y el Malo", "Hasta que llegó su hora"," Por un puñado de Dólares", "Los siete magníficos" o "El Joven Indiana Jones". En fin, que parecer ser que acertamos.

Nada más entrar, pedazo de vaquero que nos recibe y nos señala donde dejar nuestro coche. Al bajar de él, G. nos abandona y se conecta al Ipod para escuchar la selección de bandas sonoras de westerns a cargo de Ennio Morricone, especialmente preparada para el momento. Me lo dejó un ratito y la verdad es que los estudios de cine tomaban vida, sobre todo si conseguías visitar alguna parte sin ningún turista a la vista.

El western no es mi especialidad, aunque mi peque lleve su nombre en honor a uno de los personajes del film “Centauros del desierto”, pero tengo que reconocer que me encantó aquel lugar. Decidimos vivirlo al más puro estilo guiri; abriendo de par en par las puertas del salón, poniéndonos la soga al cuello, subiéndonos a carretas y mordiendo el polvo porque otra cosa no, pero polvo llevábamos hasta en el carnet de identidad. Decidí comprar un gorro de cowboy para el peque, todos se reían de mi compra pero al final todos nos hicimos una foto llevándolo puesto.  Y como buenos guiris, nos apuntamos a los dos espectáculos anunciados e interpretados por verdaderos “stuntmen”.

Camino al “Saloon” para el show de las 12’30, arresté al vaquero de la entrada. Le tomé por sheriff pero me dijo que él era el malo así que le arresté yo y le llevé a la cárcel donde nos echamos la primera foto. A lo lejos, en el Saloon, el resto de forajidos esperándole. Uno de ellos, clavado a Jordi Mollà, me apunta con su pistola al entrar y simula que me dispara pero el Saloon ya está a tope de gente para el show y yo no sé cómo reaccionar. Creo que me suben los colores...

El show no está nada mal, no pretenden nada, tan sólo hacerte pasar un buen rato y lo consiguen, entremezclando chistes e interactuando con el público. Creo que hasta improvisan porque de tan en tan los ves partiéndose de la risa simulando estar muertos mientras escuchan a los compañeros seguir con el show.
Al acabar éste, chicos y chicas decidimos separarnos hasta la hora del segundo show; nosotras entramos en la tienda de disfraces y allí me encuentro a dos vaqueros, uno de ellos el del Saloon el cual vuelve a dispararme. Ésta vez no me mata, no hay tanta gente y le planto cara. A. me anima a disfrazarme y mientras discute con el otro sobre si me pega o no el de India, Jordi Mollà agarra el de Can Can y, cogiéndome por la cintura, me lleva al probador. Allí me dice que tengo que quitarme la ropa y me explica que si el vestido me queda grande que le avise, que me lo arregla. Me subió la cremallera del vestido y me puso las botas, una a una y muy despacio. No me dejó ni ponerme la pluma en la cabeza ni la gargantilla en el cuello así que le pedí que hiciera la gracia completa y también me colocara la liga en la pierna derecha.
Al salir de allí, todos pensaron que mi sofoco era del calor del probador. Rápidamente me cogió de la mano y me plantó fuera, donde todos los guiris me miraban divertidos. Se supone que iba disfrazada de can can pero G. me dijo que era de prostituta porque en los westerns no existían esas bailarinas. ”Bah, qué más da. Nadie me conoce aquí” –pensé-. Así que me dediqué a posar junto a mi vaquero para las fotos mientras el grupito se partía de la risa. Tampoco dejó que me quitara el vestido sola.“Vuelve a las tres”- me dijo. Más tarde, durante el segundo show, éste en el exterior, me guiñó un ojo al aparecer montado en el caballo. A. me tomó el pelo diciendo que últimamente me ha dado por los artistas.

No volví a las tres pero, con la excusa de darme un plano del lugar, volvió a aparecer. “Bienvenida a Almería”-pienso- Pero la verdad es que he venido a desconectar y a descansar y si hay una cosa que ahora respeto al máximo es no cambiar mis planes por un hombre. “Te llevo de souvenir”-le digo-.

Vuelta al grupo, para entonces, están hablando con el dueño de aquello, el cual nos explica orgulloso que aquellos son los estudios originales y que aún se siguen rodando películas allí. Es él quien nos saca de la duda de los dromedarios, ¿qué pintan allí? Pues nada, es sólo que el clima les va mejor, los caballos los tienen en Sevilla.

Al salir, Rocío, una antigua compañera de trabajo de Barcelona, ya hace rato que me ha visto pero ha esperado a verme quieta para saludarme. ¡Glups! y yo que pensaba que allí no me conocía nadie...

Por la tarde, A y yo dejamos a los chicos de tapeo y nos aventuramos a descubrir Agua Amarga. Hasta las diez de la noche estuvimos en la playa. Decidimos cenar allí también, en una plaza donde se respiraba ese ambiente andaluz que tanto me gusta, niños jugando libremente y tapas, muchas tapas. Había una nena clavada a la mía. Procuraba no mirarla mucho pero los demás también lo notaron y así me lo hicieron saber. Volví a discutir con F, ésta vez de manera más agresiva, pero esa parte quizás toque en otro momento...